Seguidores

Translate

lunes, 15 de noviembre de 2010

Ulises y Circe

Circe o Calipso abierta hacia la espera
observa el mar, atisba a Poseidón.
Sólo su espuma de rizada fiera
enturbia y morigera la luz de su pasión.
De lasitud preñada; su corazón golpea
con latido de parche y hace temblar su sangre
Necesita caerse, se marea,
en el cuerpo de un hombre. Es una tea,
pero líquida, urgente. Su carne siente hambre.
Sed también de sudores ambarinos.
De seminales lavas de volcanes
que mojen sus cosquillas,
como helados carámbanos marinos
y que mengüen y aumenten sus imanes
y deslicen detrás de sus rodillas
ríos de estrepitosas maravillas.
Ulises, marinero, entre héroes tahúr,
ha llegado a su carne y mira sus arenas
con deseadores ojos, cielos de sal y sur.
Circe aprieta en sus párpados sus encendidas venas
Y desea al instante que el hombre la posea
Se dirige a la playa e impetra la marea
Y Poseidón le entrega al intrépido amante
Hechizado, dispuesto y dócil a su pulso,
morará en el Palacio maleable a su talante
Su reciedumbre entonces hará estallar convulso
ese cuerpo de Diosa que habita la centella.
Calmará los ardores, los fuegos contenidos,
que desvelan sus nervios para hacerla doncella
nueva mujer, de nuevo, por todos sus sentidos.

Amílcar Blanco

Noviembre de 2010

4 comentarios:

  1. Perdón por la supresión del anterior comentario, soy una pésima mecanógrafa y me han salido un par de erratas, lo repito ahora corregido:

    Amilcar querido, mil gracias por tan bello poema, es de lo más hermoso que he leído y veo que te has inspirado en el que he compuesto hace un par de días. ¡Gracias por el sin par poema, por el bello comentario, por ser tan buen amigo! El poema rezuma delicadeza y sensualidad y es de un gusto por lo clásico, exquisito, no podría decirte qué verso me ha impactado más, pues todos me agradan sumamente, son apasionados y ardientes como esos amores legendarios que relatan...
    Los personajes de Calipso y Circe siempre me han fascinado. A Circe ya la he mentado en dos poemas, en uno de ellos aparece con su Ulises u Odiseo, creo que entonces no nos conocíamos aún, te copio el enlace para que lo veas, si gustas, es para copiar en la barra de tu navegador:

    http://maytedalianegra.blogspot.com/2010/10/te-vi-partir.html

    Para despejar tus dudas te diré que soy asturiana, del norte de España, es mi chico el que es andaluz, por eso digo lo de estirpe turdetana o sangre bética. Ya ves, norte y sur unidos en el amor, pues cuando se ama no importan ni las distancias ni las diferencias.

    Y sobre el vino, sí, me encanta, el tinto más, aunque el blanco y los espumosos también me gustan mucho. De hecho, no concibo una buena comida sin el acompañamiento de un vino adecuado, es un placer para los sentidos, que, además, ayuda a digerir bien y es hasta sano para el sistema circulatorio, siempre que se consuma con moderación. ¡Y está tan rico! Jajaja.

    Mil gracias por todo, mi querido amigo, me has emocionado profundamente, poeta.

    ¡¡¡¡Y mil besos!!!!

    ResponderBorrar
  2. ¡Gracias, Mayte, de nuevo, querida amiga y saludos al andaluz! Tengo antepasados gallegos, de Orense, de donde viene el apellido Blanco, y de Pontevedra, de donde viene Palmaz. Creo que Asturias tiene límites con alguna de las provincias gallegas. Me encantaría conocer Oviedo, una ciudad con mucha historia. Mi hijo mayor, que me hizo abuelo, vive en Madrid. En cuanto a vinos, en la Argentina tenemos de todas las cepas, gustos y calidades que te puedas imaginar. De verdad me gustan mucho tus poemas. Ahora mismo voy a ir a leer el de Ulises y allí mismo te lo comento. Hasta siempre y miles de besos también!!!

    ResponderBorrar
  3. Si, Amilcar querido, Asturias limita con Galicia en su zona occidental y yo misma tengo familia en Orense también. Aquí en Asturias también es muy común el apellido Blanco. No me despido aún , pues voy a leer tu nuevo, post, poeta...

    ResponderBorrar

Los comentarios son bienvenidos pero me reservo el derecho de suprimir los que parezcan mal intencionados o de mal gusto